Acceden de nuevo dos de nuestros compañeros para continuar con la exploración de la CÑ002 desde donde se abandonó el día anterior. Dado que la desobstrucción ya estaba casi completada solo quedaba introducirse por el pequeño agujero abierto. Pero al intentarlo comprueban que sigue siendo demasiado estrecho. Lo intenta uno de ellos, desobstruyendo a su vez lo que queda de la repisa que da acceso al agujero. Pero debe desistir dado el tamaño de este. Tras de él, el otro compañero, de dimensiones más reducidas, consigue posicionarse de tal forma que acaba accediendo por el agujero tras varios intentos.
Al acceder encuentra una especie de meandro de suelo arenoso con altas paredes con forma de coladas. Tras instalar un tornillo como fraccionamiento, accede a una repisa desde la que descendiendo o ascendiendo por una rampa puede moverse a lo largo del meandro. En su parte descendente, tras un par de estrechas curvas, la sima acaba cerrándose. En cambio, en dirección en la que se venía y siguiendo la rampa ascendente, encuentra una peña escalada de 4 metros, por lo que espera a su compañero para que le proteja la trepada. Una vez ya abajo el otro compañero, proceden a realizar la escalada esperando uno de ellos abajo para proteger también el descenso. Ya arriba observa que el meandro se acaba cerrando, pero aparece un pequeño agujero de difícil desobstrucción por el cual se pierde el sonido de las piedras que tira por él. Aun así, debido a la faraónica empresa que resultaría su desobstrucción, lo más probable es que por ahora se finalicen aquí los trabajos de exploración emprendidos en esta incomoda sima, a falta de la topografía de la nueva zona explorada.